La Humada: el pueblo pampeano donde no llegó el asfalto

POR LA 10

Si venís del norte, en La Humada muere la ruta provincial 10, muere de tierra, entoscada, con serruchos, con unos terribles pozos y poblada de guardaganados. Pero si partís del oeste pampeano, acá nace la ruta 10:  entoscada, con serruchos, con unos terribles pozos y poblada de guardaganados.

Se extiende desde el límite con Buenos Aires, atraviesa La Pampa, hasta el límite con Mendoza. Es casi en su totalidad, de asfalto. El kilómetro cero está en Miguel Cané. Luego, hasta Colonia Barón y se corta. Retoma en Winifreda, con dirección hacia el oeste: Luan Toro, Loventuel, Victorica, Telén, La Pastoril, Emilio Mitre y, antes de llegar a Santa Isabel, se vuelve a cortar (ruta nacional 143). La ruta 10 retoma en Algarrobo del Águila- de tierra-, con un tramo de 80 kilómetros hasta llegar a La Humada. Finaliza luego de 30 kilómetros, límite con Mendoza, ingreso a Agua Escondida.

LA HUMADA

El pueblo se fundó en 1929. Hasta 2005, año de la fundación de Casa de Piedra, La Humada era la localidad más nueva de La Pampa. Según el último Censo (2010 - Indec) La Humada tenía 657 habitantes. Hoy esa cifra es ampliamente superada. Estiman que entre la población urbana y rural son más de mil habitantes.

LAS PISTA

Todas las calles del pueblo son de tierra. Pese a que en algunas está la obra de cordón cuenta, el pueblo no tiene ni una sola calle con asfalto.

Hace 10 años atrás, en 2012, el exgobernador de La Pampa Oscar Mario Jorge aterrizaba en La Humada y dejaba inaugurado al costado de la ruta 10 los 1.250 metros de largo y 30 de ancho de asfalto. Se trató de la primera pavimentación en el pueblo y la obra era una pista de aterrizaje.

LAS MÁQUINAS EN LA RUTA

Días atrás, el dueño de un transporte de pasajeros contó que abandonaba el servicio por el mal estado de la ruta provincial 10. “Tenés que ir a 10 kilómetros por hora porque la ruta es un desastre. El abandono en los guardaganados. Los pozos que tenés antes de llegar a la Barda te tocan el tren delantero de la combi. Tuve que reparar la amortiguación, son 50 mil pesos. Una rueda, 60”, manifestó en diálogo con el programa PCR (Periodismo Con Retumbe).

Luego de la publicación, las máquinas de Vialidad Provincial llegaron a la ruta y en una semana repasaron 40 de los 83 kilómetros que tiene el tramo. Ahora, el transportista volvió a viajar.

Por ahora, la ruta sigue siendo de tierra y las máquinas tratan de ponerla en condiciones. Aún falta, pero algún día, las máquinas vendrán por el merecido asfalto de la ruta y la tan ansiada obra en las calles del pueblo, sueño de sus pobladores.

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