¿Y si la Inteligencia Artificial generativa no fuera un instrumento?
Una analogía posible del uso de la IA generativa —y acaso tentadora— es la del instrumento musical. Pensemos en un arpa: sus cuerdas están ahí, dispuestas a vibrar al tacto humano. Quien las pulsa con sensibilidad, conocimiento y precisión, obtendrá de ella melodías complejas y conmovedoras. Así funciona, en muchos sentidos, el arte de formular prompts: cuanto más preciso, situado y expresivo sea el estímulo, más rica y matizada será la respuesta del agente.
Columnas21 de abril de 2025
Juan Pablo Neveu